Ahora estoy borracho (6)
Ok, como digo en el título, ahora estoy borracho.
Tambien me estoy meando, pero que me da extrema paja ir al baño, así
que voy a escribir muy rápido, muy muy rápido, porque así me da la
sensación que voy a estar meando antes.
Acaba de entrar el primo que se fue a comer algo con un Australiano
que se hace pasar por inglés.
Me voy a mear mejor.
Ya vuelvo.
¿Me esperan?
Al primo le encanta el teclado y a mi también, por eso sigo acá y
todavía no fui al baño. Es como que le gusta que escriban en él.
Baño. Ahora. Sí. Andá. Dale. Dale. Dale. Andá. No puedoooo. Dale,
andá. Dale. Bueno, Voy, pero ahoraaaa!! . Voy. Ahora sí. Voy.
Ya volví. Les confieso que no me lavé las manos. Ahora le voy a pasar
la mano por el hombro al primo, pero tengo que pensar en una excusa.
Sólo ustedes y él cuando lo lea van a saber que no me las había
lavado. No se me ocurre ninguna excusa. Ah, sí… amazonas…
bichos… mosquitos… listo. Ya lo golpeé y ni sospechó. Creo que
también esta borracho porque ni se mosqueó.
Bueno, a ver… ¿en qué estaba?
¿¿¿Shift + Enviados funciona???
No funcionó pero ya volví.
Le sacamos la astilla al primo, y algunos fueron a comprar cosas para
la noche mientras otros tomabamos cerveza, y otros se bañaban. Al rato
llegaron las compras, y Romain me pregunta: “¿se puede cocinar acá?”.
Excepto que me lo preguntó en portugués porque Romain no hablaba
español el muy ignorante. Le respondí que sí, que claro.
Unas horas antes, cuando llegamos al hostel de Nestor, el MILLENIUM
II, le pregunté al negro que cargó la mochila de la colorada si tenía
cocina y me contestó que sí. Obviamente es la respuesta que me
convenía escuchar y no seguí indagando.
Llegan los chicos con la comida, y nos adentramos en la cocina del
hostel. Cuando nos vió Nestor, nos explicó que la cocina no es para
todos, sino de ellos, de los dueños. Como vió que ya habíamos comprado
todo, nos dijo que él cocinaba la comida, para que no hagamos quilombo
en su cocina. Obviamente todo el tiempo lo jodíamos despues con que
nos cocine, que qué nos iba a cocinar al día siguiente, etc.
Arrancamos a armar nuestras propias caipirinhas, a fumar porro, y al
rato estabamos todos re locos o re borrachos. Re Re Re. Do Re Mi. Yo
me metí en la cocina de Nestor y le ofrecí mi ayuda. Me preguntó a mi,
un alcoholico irrecuperable, si la cantidad de agua era la correcta, y
le dije SEEEEEEEEEEE. Al toque eché los tres paquetes de fideos en el
agua, y me di cuenta que iba a faltar bocha de agua, pero soy
demasiado testarudo para reconocerme eso a mi mismo, así que intenté
hervir los fideos con esa cantidad de agua, seteando el cronómetro a
los 10 minutos que indicaba la bolsa tal cual me lo indicó Iary, alias
El Tano, alias La Maldición de TutanPablo, que ahora me devolvió a mi
el hijo de puta.
Nestor me dejó los fideos a mi. Al rato entró Estefi y me ayudó a
revolver. En mi nivel de alcoholismo / fumanchismo le pregunté si le
parecía bien que echemos más agua, porque no alcanzaba para cubrir a
todos los fideos. Obviamente ya llevaban 5 minutos de cocción e iba a
ser un enchastre echar más agua. Estefi creyó que no era una buena
idea, pero yo le eché más agua de todas formas para experimentar un
poco, recordando que es posible marcar los fideos con agua fría y
continuar la cocción más tarde. Bueno, en resúmen: los fideos salieron
como el ojete, todos pegados, cagados a trompadas. Saludos a la mamá
de Zapmin que lee los mails. Gracias. Saludos a todos los que leen
estos mails, los quiero mucho.
Listos los fideos, a servirlos. La salsa estaba buena. Un tuco con
pedazos de carne copados. Terminamos de cenar, algunos fueron a lavar
platos, y otros continuamos haciendo las caipirinhas con unas cachacas
y limas que habíamos comprado. Eramos: Primo (Jony, mi primo
pelotudos, ¿quién creían?), Yo (YO, el que manda el mail…), Romain
(francés), Estefi y Sofi (argentas), Lucila (argenta), Mati (de
Polvorines, todavía estamos buscando en el mapa donde carajo queda),
Karina (para mi retrasada mental, aunque para el primo la retrasada
mental era Lucila), Janaeiena Gianina (brazuca copada), y Felipe
(brazuca copado). Bueno, unas caipiras, una ronda de porro aguantando
el humo hasta que llegue al siguiente, y todos re locos.
Empezamos a jugar a un juego muy especial. Cada uno era un animal, y
tenía que llamar a otro animal de la ronda. Por ejemplo yo era un
caballo y el primo era un burro, entonces tenía que pararme,
representar a un caballo, y decir (mientras representaba al caballo):
“caballo eeeehhhiiiii llama a “… y mientras representaba al burro
“burro”… y todos re locos interpretando animales de la selva que se
llamaban entre ellos. Estefi y Sofi le agregaron al juego que todo lo
que digamos había que decirlo con los labios sobre los dientes, así
que era mucho más gracioso y mucho más de drogón jugarlo.
Al rato nos fuimos a comprar más cachaca y limones al super, con
Estefi, Sofi y Romain. De travieso nomás se me ocurrió meter un ajo
dentro de la bolsa de los limones. El tipo lo pesó como si fuesen
todos limones, y cuando llegamos a la caja la cajera ofendida gritó:
“hay un ajo acá adentro, ¿¿¿quién pesó esto???”. Reconocí la
travesura, un brazuca me preguntó mientras se llevaba la bolsa entera
para pesarla nuevamente si quería el ajo, le dije que no lo quería, y
volvió con una bolsa en la que había agregado de todas formas el ajo
como diciendo: “pelotudo, llevate esta mandarina carolina”.
Jugamos un poco a esa pelotudez, y salimos a la playa, donde al mejor
estilo brasil habían muchos puestos uno al lado del otro en donde
vendían caipirinhas y bebidas alcoholicas frutales por 3 Reales.
Habremos tomado algunas caipirinhas, algunos cuba libres, hasta que
Romain nos ofreció a todos clavarnos un shot de cachaca. Puto Romain
francés loco. Creo que me tomé medio vaso, me dieron ganas de vomitar,
me alejé de todos hacia la playa para no pasar verguenza, contuve el
vomito, y tiré el resto de la cachaca a la mierda. Las únicas que no
tomaron fueron Estefi y Sofi que no tenían ganas. Nos sorprendió
porque a Sofi ya la tratabamos de alcoholica.
Estuvimos un rato por ahí boludeando, bailando forró porque uno de
estos puestitos tenía música. Se fue llenando de argentos, empezaron a
poner música muy argentina, cumbia argentina… cada vez mas argentos,
y nos fuimos a dormir.
Al día siguiente amanecimos temprano. Faz de conta que ainda e cedo…
gran tema, recomendado. ¿Amanecimos temprano?, no me acuerdo a qué
hora. Pero nos fuimos a caminar romain, mati, primo y yo por las
playas. Caminamos un montón. Cada tanto entrabamos al agua. El morro
es raro. Hasta el mediodía el agua de mar esta leeeeeeeejos. Muy
lejos. Para meterte hasta la cintura tenés que caminar como 300
metros. El agua está calentita. No es por las meadas de los nenes,
sino porque está como medio estancada por unas horas hasta que sube la
corriente. Temperatura perfecta. Mucho relax, viendo las palmeras. El
morro es un lugar maravilloso, de a de veras.
Caminamos, entramos al agua, charlamos. Romain votó a Zarcozy (ni idea
como se escribe) en la primera ronda y despues en blanco. Mati estaba
con problemas para sacar guita y tenía miedo que le hayan clonado la
tarjeta como a Kenghi y robado todo. El primo todo bien con el doctor
Arias.
Caminamos como 3 horas, y a la vuelta hicimos escala en un restaurante
al lado del mar. Comimos lo tipico: pollo con arroz, feijoes y
ensalada. Muy buena comida.
La marea fue subiendo y cuando terminamos de comer ya casi teníamos el
mar a nuestros pies. Seguimos caminando, y era increible cómo había
cambiado el paisaje por la subida de la marea. Donde antes había
árboles y arena, ahora había mar y árboles. Era como un camino nuevo.
Un nuevo paisaje.
Llegamos a nuestra playa, la playa dos. Habremos entrado al mar,
talvez cenamos afuera una pizza. Había una fiesta en El Teatro, pero
era una larga caminata y preferimos volver a la playa dos despues de
la pizza a tomar algo por ahí. Tomamos unas cuantas cervezas durante
la pizza y luego algunas caipirinhas o cuba libres en los puestos de
la playa. Luego fuimos a una fiesta muy argenta en un bar. Cuando digo
argenta… el flaco que pasaba música desde su mp3 conectado al equipo
de música del bar era argentino. Le pedí “la ventanita”, me respondió
“ya va a llegar”, y nunca la puso el hijo de puta.
Bueno, típica fiesta llena de argentinos. Fue divertido, pero
demasiados argentinos en el morro. demasiados.
Nos fuimos a dormir y me desconecto porque nos vamos a un bar con un
austrliano que pasó los últimos 7 días en cama por Dengue. Hoy leímos
en el diario 10 MUERTOS POR DENGUE. GENIAAAAAAAAAAAAALLLL. Y ESTA
CIUDAD ES PELIGROSISIMA. ME ENCANTA.
Besos en la nalga derecha de la tía que mas quieran. Por favor
mandenle este mail a sus tías, las que mas quieran, para que reciban
mi beso en sus nalgas.
Los quiero, como siempre.
Pablo.